Una peregrinación iluminó el Santuario Nuestra Señora del Cielo

El Santuario Nuestra Señora del Cielo, ubicado en La Lonja, cerró el mes de mayo con una peregrinación luminosa cargada de simbolismo y fe. En vísperas de Pentecostés, decenas de fieles participaron de una emotiva marcha de antorchas bajo el lema: “Peregrinar de la mano de María y por María para encender el mundo”. Según sus impulsores, la propuesta surgió como una respuesta a los tiempos difíciles: "Vivimos en un mundo que invita a la oscuridad, pero lo contrarrestamos con el amor de la Madre y la luz que nos guía", señalaron.

Mayo, mes mariano por excelencia, incluye celebraciones dedicadas a la Virgen de Luján, la Virgen de Fátima y María Auxiliadora. En ese contexto, la actividad buscó renovar el vínculo con la espiritualidad, con la intención de repetirla cada año como parte del calendario del santuario. La caminata nocturna, realizada con antorchas encendidas, unió oración, reflexión y comunidad en un mismo gesto de fe.

El templo pertenece a la Iglesia de la Sagrada Familia, inaugurada en 2018, una de las más recientes del distrito. Su diseño moderno combina piedra, luz natural y detalles simbólicos, como el vitral del rosetón o el campanario. En el altar central se destaca una réplica de la Sagrada Familia del pintor barroco español Murillo, cuya escena familiar y sagrada realza el espíritu del lugar.

Uno de los mayores tesoros del santuario es un Cristo crucificado del siglo XVII, tallado en madera y traído desde Oberammergau, un pueblo alemán que, tras la peste bubónica, se comprometió a representar la Pasión de Cristo cada diez años, tradición que continúa hasta hoy. La figura, de color blanco y expresión doliente, reposa sobre una cruz hecha con madera de olivo adquirida en Jerusalén, lo que le otorga un valor espiritual y simbólico adicional.

La Misión Nuestra Señora del Cielo, fundada por Marta Quevedo y Oscar Smith, no sólo impulsó la construcción del santuario, sino que también desarrolla tareas solidarias en la comunidad, con comedores comunitarios, acompañamiento pastoral y actividades misioneras que reflejan una fe puesta al servicio del prójimo.