En abril, el Gimnasio París celebró sus 37 años de funcionamiento continuo en el corazón de Pilar. Este emblemático espacio, ubicado en 11 de Septiembre 828, está enfocado en un desafío único: lograr la certificación como el gimnasio pequeño con más alumnos registrados en todo el mundo.
Con una superficie menor a 350 metros cuadrados, el establecimiento acumula un impresionante archivo de 57 mil fichas personales de quienes entrenaron allí a lo largo de casi cuatro décadas. “Queremos lograr el récord como gimnasio chico, término que usamos para lugares con menos de 350 m², con la mayor cantidad de alumnos a nivel global. Cada ficha corresponde a una persona que pasó por nuestro gimnasio”, explicó Oscar Ramondelle, titular del lugar.
Este dato surgió inesperadamente durante la renovación del personal de recepción. Mientras actualizaban el equipo administrativo, descubrieron antiguas fichas que aún se conservan en papel, lo que despertó la idea de certificar ese récord mundial. Sin embargo, el alto costo del trámite para ingresar al Guinness World Records, estimado en alrededor de 22 mil dólares, representó un obstáculo para avanzar en esa dirección.
A pesar de la dificultad económica, el gimnasio no abandona su objetivo. Gracias a un contacto vinculado a la marca Reebok, que fue imagen internacional, se estudian otras opciones para validar el logro, como participar en ligas internacionales de gimnasios o presentarlo en congresos de fitness.
El Gimnasio París no es solo una cifra. Es un referente local que vio pasar generaciones enteras de vecinos y deportistas, manteniendo un fuerte vínculo comunitario. Con una oferta diversa que incluye máquinas de musculación, fuerza y resistencia, junto a clases de taekwondo, funcional, fulltrainer y kickboxing, el gimnasio sigue renovándose con un equipo de ocho instructores comprometidos y en constante formación.
Además, el espacio se destaca por su ambiente familiar, donde cada alumno recibe atención y seguimiento personalizado. Esta cercanía fue clave para consolidar una comunidad sólida que vuelve una y otra vez. En un mundo donde los grandes gimnasios suelen ser impersonales, el Gimnasio París apuesta por conservar ese trato cercano que lo diferencia y que, con el tiempo, se traduce en historias de superación y compromiso con la salud.
Más allá del récord, el Gimnasio París busca que se reconozca su historia y el legado de salud y bienestar que sostiene desde hace casi 40 años en Pilar.
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