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La madrugada de San Pablo amaneció bajo una lluvia torrencial que dejó a la pista en condiciones traicioneras, que terminó impactando horas más tarde en el desarrollo de la carrera Sprint. Los pianos, en especial a la salida de la S de Senna, mantenían agua acumulada, fue allí donde Colapinto se despistó y terminó contra el muro.
El pilarense no fue el único en caer en la trampa, porque Oscar Piastri, escolta del campeonato, fue el primero en perder el control al tocar con su neumático el piano mojado. Detrás suyo, Nico Hülkenberg repitió la trayectoria y también terminó contra la pared, aunque con daños menores. Y finalmente, Franco completó la secuencia cuando venía 14º, había ganado dos posiciones en la partida y sostenía un ritmo estable, pero el exceso de agua en la zona lo llevó al golpe más fuerte de los tres.
El impacto dejó su A525 visiblemente dañado y generó preocupación, aunque Franco se encargó de llevar alivio al equipo con un mensaje rápido por radio al decirles, “Estoy bien”. Más tarde, el piloto local manifestó no entender del todo lo sucedido.
“Una pena, la verdad. Todavía no entiendo bien por qué perdí el auto, había agua o algo. Hay que tratar de entender y ojalá que puedan arreglar el auto, tiene varios daños. Intentar volver más fuerte. Varios se fueron ahí, raro el grip de una vuelta a otra. A trabajar para la próxima. Ojalá pueda volver para la próxima”, expresó.
Ahora, los mecánicos de Alpine deberán trabajar a contrarreloj para reparar el monoplaza y permitirle participar en la clasificación que arranca a las 15.
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